sábado, 8 de marzo de 2008

Texto breve acerca de "La Mudadora"

A veces el cuerpo muda y cierto espíritu queda entre los muros, las manchas que habitaron siguen haciéndolo, la casa respira con aire de cambio, respira por los poros de las paredes.

La casa, inmóvil, es mudada…. hasta la instancia del silencio en sus materiales, hasta que dice nuevamente.

La mudadora toma el espacio, es espacio en circulación, milimétricamente recorre cada grano de polvo descubierto detrás de un zócalo, en un repasador que hacía de cortina, en un viejo ropero, en una lámpara, en el sótano, debajo de los pisos. La casa respira y es resignificada.

Ventanas, puertas, escalones, techos, cocinas, baños, cuartos, patios, mesadas, cuadros, fisuras, humedades, polvo, sonidos, vidrios, botiquines, clavos, voces, diálogos, plantas, sombras, lenguas, huellas, rastros, olores, sillas, libros, muñecos, roperos, camas, cortinas, colchones, paredes, pisos…marcas de los tiempos, cada instante se resume y el olvido se hace presente en cada acción que vuelve y habita, se instala, rememora, documenta, registra, testimonia, busca, enumera, enumera cada partícula de cada imagen, hecha de nuevas miradas.

A veces el cuerpo abre la puerta y sale, pero algo queda en la casa habitándola.

La Mudadora 3ra Edición - Alsina 1760


Recibimos la invitación de German, y las imágenes comienzan a circular. Él, nos cuenta que la casa fue construida a principios del siglo pasado, en lo que por aquel entonces serían las afueras de la ciudad.
Esta casa, pronto se transformará en otra casa.
Junto a Vendi, Amarena, Ian y German un puñadito de encuentros intensos se sucede. Observamos el espacio, lo habitamos dentro de un lapso que demarcamos como una transición.
Actuamos en poco tiempo cronológico. En cambio, nos incorporamos al Aión, ese tiempo otro, no lineal, en el que las ideas fluyen y se comparten. Es a partir del encuentro, del deseo de encuentro, como surge nuestro trabajo. Cada uno, a su manera, se relaciona con los otros y con el lugar, con su pasado y su futuro, para señalar un momento fugaz, la situación de mudanza. Surgen las huellas de la huella, la construcción, las miradas, los proyectos.
Nos encontramos con una especie de rito de pasaje, en una celebración de apertura.


Cristina Coll


Andrea Fasani
Juliana Ceci


Sonia Neuburger

Claudia Toro
Marcela Sinclair

Marianela Depetro

Pablo Caracuel

Alejo RotembergRegistro Fotográfico: Claudia Toro, Marianela Depetro, Sonia Neuburger

sábado, 1 de marzo de 2008

Mudadora 2da Edición

“Una casa deshabitada no es de hecho una casa real”

Producimos, provocamos, intervenimos y habitamos el particular intersticio que se abre en la irrealidad que surge en algo que dejó de ser lo que fue.

Una casa de principio de siglo pasado, “tipo chorizo”, se presenta no sólo ante nuestros ojos. Nos reunimos, Mercedes nos cuenta que en este lugar, funcionó un hogar de mujeres durante 12 años, de 1995 a este enero de 2007. “Exiliadas internas” que encontraron una casa, una familia, una pertenencia.

Nos empapamos del espacio, ronda un espíritu de mudanza y hasta de campamento. Algunos objetos se desprenden de sus lugares. Las cosas, los muebles, los libros comienzan a desplazarse, producimos movimientos; las ideas circulan, crecen, se comunican.

Sonia Neburger
Claudia ToroMarcela Sinclair
Marianela Depetro
Maja Lascano
Mercedes Fidanza

Alejo Rotemberg

Regristo Fotográfico: Marianela Depetro, Sonia Neuburger